¿Qué se siente vivir con depresión?

 

“Estoy deprimido” es una frase que escuchamos muy seguido de nuestros amigos o familiares… Pero ¿realmente padecen depresión? A veces, solemos llamar “depresión” a cualquier momento en el que nos sintamos tristes o desmotivados; sin embargo, la depresión es más que eso. Se trata de un trastorno de salud mental del cual debemos hablar con seriedad.

La depresión suele tener un espectro amplio; a pesar de esto, existen algunos síntomas característicos, como estado de ánimo bajo, sentimientos de tristeza profunda, pérdida de interés, cansancio excesivo, sentimientos de culpa, demasiado o muy poco sueño, disminución o aumento del apetito, autolesiones y, el más preocupante, pensamientos suicidas. En muchas ocasiones, estos síntomas pasan desapercibidos… Hasta que ya es demasiado tarde. Las personas que han intentado o se han quitado la vida no lo han hecho porque quieran morir, lo han hecho porque quieren dejar de sufrir. Por lo tanto, un tratamiento psicológico oportuno es el mejor remedio.

Cada persona atraviesa este proceso de diferente manera. Lo ideal es que tengas un soporte emocional; es decir, algún amigo o familiar en quien puedas confiar y puedas expresar tus sentimientos libremente. Si no es posible, la escritura puede ser de gran ayuda. Aunado de un tratamiento terapéutico oportuno, el pronóstico para los pacientes suele ser muy positivo. En mi caso y el de muchas otras personas, la terapia no es suficiente y se conjunta con un tratamiento psiquiátrico que implica el consumo de ansiolíticos o antidepresivos… Todo esto con la finalidad de salir adelante y seguir con nuestras vidas como solíamos hacerlo.

Recuerda que las personas con depresión también pueden ser productivas y trabajadoras en exceso, esto como una manera de ocultar un poco su dolor y evitar enfrentar sus emociones. Incluso, pueden actuar completamente normal y aparentar ser felices ante la mayoría de las personas… Pero no olvidemos que esto es solo una máscara que oculta lo que sienten en realidad. Solo actúan para no preocupar o no molestar a las personas que les rodean. Lamentable, lo único que se logra con esto es caer más y más profundo en este trastorno.

Si en algún momento de tu vida llegas a sentir que tu tristeza te está sobrepasando y ya es un impedimento para llevar una vida normal, te recomendaría que acudas con un profesional de la salud mental (un psicólogo, en primera instancia) para que evalúe tu situación y se tomen medidas al respecto antes de que sea muy tarde.